VIOLENCIA DOMÉSTICA Y VIOLENCIA DE GÉNERO



La violencia doméstica y la violencia de género no son lo mismo. Pese a que, en el ámbito familiar, matrimonial o de pareja exista la violencia, esta debe ser distinguida dependiendo de quién la ejercite y sobre quién lo haga.  

 

La violencia doméstica puede consistir en una violencia tanto física como psíquica y puede ejercerse sobre quien sea o haya sido su cónyuge o sobre persona que esté o haya estado ligada a él por una análoga relación de afectividad aun sin convivencia. También puede ejercerse sobre los descendientes, ascendientes o hermanos por naturaleza, adopción o afinidad, propios o del cónyuge o conviviente. Además, pueden ser sufridores de dicha violencia los menores o personas con discapacidad necesitadas de especial protección que con él convivan o que se hallen sujetos a la potestad, tutela, curatela, acogimiento o guarda de hecho del cónyuge o conviviente. Y, finalmente, también puede ser ejercida sobre una persona amparada en cualquier otra relación por la que se encuentre integrada en el núcleo de su convivencia familiar, así como sobre las personas que por su especial vulnerabilidad se encuentran sometidas a custodia o guarda en centros públicos o privados.  

 

Desde 2004 en España una ley especial es la que regula la violencia de género. Pero, ¿conocemos todos a lo que se refiere la violencia de género? La violencia de género se considera un problema de ámbito público y se trata de una violencia que se dirige sobre las mujeres por el hecho mismo de serlo, por ser consideradas, por sus agresores, carentes de los derechos mínimos de libertad, respeto y capacidad de decisión. 

 

La violencia de género se ejerce sobre las mujeres por parte de quienes sean o hayan sido sus cónyuges o de quienes estén o hayan estado ligados a ellas por relaciones similares de afectividad, aun sin convivencia, como manifestación de la discriminación, la situación de desigualdad y las relaciones de poder de los hombres sobre las mujeres.  

 

El número de víctimas de ambos tipos de violencia ha incrementado en el año 2019, las víctimas de violencia de género han aumentado un 2,0%, mientras que las víctimas de violencia doméstica han crecido un 3,6%.  

 

La llegada del Covid-19 a nuestras vidas y el confinamiento de los últimos meses ha provocado que, desde el 14 de marzo, muchas de las víctimas de la violencia doméstica y la violencia de género hayan tenido que pasar el confinamiento en casa con sus agresores, debido a la declaración del estado de alarma en España.  

 

El impacto de las medidas tan restrictivas ha provocado que los datos institucionales respecto a estos tipos de violencia hayan sufrido cambios. Por ejemplo, pese a que ha existido un descenso en el número de denuncias, ha incrementado la solicitud de ayuda y apoyo tanto telefónico como virtual. Por lo tanto, se podría concluir que aquellos que han sufrido este tipo de violencia se han visto obligados a realizar un ejercicio de contención.  

 

No se debe olvidar que el derecho a la libertad y el derecho a la igualdad son derechos de todas y todos, por lo tanto, ¡defiéndete!